Gladys Ruiz de Azúa, Tania Jiménez Cutanda, y Eduardo J. Rodríguez, grandes triunfadores de una gala en la que se premió a Carmen Posadas y Marta Robles como autoras consagradas
La ciudad de Sevilla acogía por segunda vez, tras varios años teniendo lugar en Barcelona y Madrid, la entrega de premios que celebra Editorial Caligrama, el sello de autores emergentes más prestigioso en lengua española y con mayor número de casos de éxito. La deslumbrante María Jesús Pérez Navarro, autora de El sufrimiento de las cigarras (Caligrama, 2021), recientemente reeditado por el sello B de Bolsillo de Penguin Random House, es un buen ejemplo de ello.
El evento tuvo lugar en Platea Odeón, dentro de la histórica estación de trenes de Plaza de Armas, en el centro de la capital hispalense. La gala acogió a más de 200 asistentes provenientes de todo el mundo en un evento en el que se unió el talento emergente con la veteranía de los autores más reconocidos. Minerva Salas, primera teniente de alcalde de Sevilla, no podía ocultar su alegría porque su ciudad acogiera esta entrega de premios «Sevilla es inspiradora y desde esta ciudad se puede proyectar literatura y cultura hacia el mundo».
El Premio Talento recayó en la venezolana, de origen español. Gladys Ruiz de Aracama, por Cinco camas para un muerto, una voz narrativa con personalidad desbordante: lenguaraz, poética, con puntos arrolladores que recupera una forma de contar algo escandalosa y muy suculenta. Al recibir el premio la autora declaró «Uno de los fundamentos de la felicidad es el agradecimiento. Y agradezco a la vida el momento amargo y duro que me llevó a escribir».
El Premio Best-Seller fue para la joven autora valenciana Tania Jiménez Cutanda por Esautre, un gran ejemplo de literatura de fantasía, que propone un mundo original y novedoso, una aventura trepidante y una historia emocionante con acción, amor, violencia y un nuevo enfoque del camino del guerrero.
Por último, el Premio Promesa fue para el canario Eduardo J. Rodríguez por La maestra de miradas, un gran ejemplo de la poesía lírica más contemporánea.
Además se otorgaron cuatro menciones de honor que correspondieron a Milo de Mia Beneset; Saltar una grieta de Ingrid Rossi; Kizukai, Kaizen aplicado a la cultura organizacional de Alejandro Kasuga; y El sueño de un cristero, de Pedro M. Ibarra.
Los premios honorarios fueron para Carmen Posadas y Marta Robles. La escritora de origen uruguayo recibió un galardón por su destacada carrera literaria en todo tipo de géneros literarios. Posadas, presente en la gala, declaró al respecto «Me ha emocionado ver la energía y la pasión que se ha respirado en esta gala de autores noveles. Escribir es un acto muy solidario».
Marta Robles recibió el Premio al mejor libro de la temporada de un autor consagrado por Lo que la primavera hace con los cerezos , en el que la escritora y presentadora de televisión explora la relación entre las emociones y la creación artística, sumergiéndonos en la vida de grandes artistas como Picasso, Bacon, Chandler, Kahlo, Lennon o Neruda. «Amar bien es muy difícil. Es el amor lo que convierte lo que sea en una obra de arte», expresó la escritora y periodista.
La gala, que fue conducida por el presentador y director de televisión Modesto Barragán, sirvió también como presentación de Lantia Films, un proyecto del grupo editorial que sirve de enlace entre los mejores libros y las productoras de Hollywood, con el fin de que las obras literadian puedan dar el salto a la pequeña y a la gran pantalla. Enrique Parrilla (CEO de Lantia Films) daba la bienvenida al nuevo y ambicioso proyecto con estas palabras: «Hoy comienza una nueva era en el mundo del entretenimiento. Lantia Films es una realidad: hemos firmado los primeros contratos para que nuestros libros salten al cine y a la televisión. Lo mejor está por llegar».
Tras el evento tuvo lugar un multitudinario cóctel en el que autores, autoridades, celebridades, empresarios e influencers pudieron conversar distendidamente mientras disfrutaban de la mejor música en directo.









