Publishers Weekly en Viñetas: Especial Terror

Con el reciente Halloween aún de cuerpo presente, nos paramos a hacer un repaso por las obras que nos han dejado una sensación de congoja en el cuerpo tras su correspondiente lectura. Poco a poco, el terror, sigue ganando presencia en el catálogo de las editoriales patrias y, a día de hoy, es una de las opciones preferidas por muchos lectores.

Dolmen nos ha hecho llegar recientemente una de las mayores sorpresas en lo que llevamos de año, la recuperación de la serie clásica perteneciente al sello para adultos de DC Comics, El Tribunal de los Secretos. Corría el año 1996 cuando debutaba en Vertigo la cabecera escrita por Steve Seagle y dibujada por Teddy Kristiansen, una nueva colección de terror que heredaba el título de otra aparecida cuarenta años antes pero cuyo planteamiento difería de la recién publicada. Durante veinticinco entregas y una miniserie compuesta por dos números especiales, acompañaremos a la joven Rain Harper, personificación de la generación X del momento y abanderada de todo el movimiento grunge que se vivió en aquellos días.

Siempre a la defensiva, mostrándose enfadada con todo y con todos, Rain busca un hogar en el que poder empezar una nueva etapa de su vida. Un cambio que llegará cuando en su camino se cruce el Tribunal de los Secretos, un lugar en el que los Juris, fantasmas encargados de juzgar y condenar a todos aquellos que guarden algún tipo de secreto oscuro, y donde nuestra protagonista se convertirá en testigo de todos los juicios que tengan lugar en la soberbia mansión. Poco importa la gravedad del asunto que no se quiera dar a conocer, este grupo de criaturas fantasmagóricas harán cumplir la ley de manera implacable ante violadores, asesinos o mentirosos. La presencia y la idea de estos seres sobrenaturales actuando como jueces añade, además, un elemento de surrealismo y misterio a la historia que ayudan a crear una atmósfera única y absorbente.

La casa en la que se desarrolla la historia está dividida en secciones (ático, sótano o regresar a la vida) que representan diferentes condenas, reflejando cada una de ellas el castigo que corresponde al crimen cometido por el culpado. Este concepto de segmentar la casa según las sentencias es una metáfora intrigante de cómo nuestras acciones pueden afectar nuestro entorno y nuestras vidas, reflejando la idea de que cada individuo lleva consigo su propio peso emocional y moral. Rain es un personaje que encarna la rebeldía y la desilusión característica de la mencionada generación X, una actitud despreocupada y un estilo de vida que reflejan la apatía y el cinismo asociados con estos jóvenes. Además, el entorno oscuro y gótico de la historia se combina con la estética grunge de la década de 1990, lo que contribuye a crear una atmósfera única.

Con estos mimbres, no es de extrañar que algunos de los principales temas que se tratan en El Tribunal de los Secretos incluyan la redención, la culpabilidad, la búsqueda de la verdad y la transformación personal. La joven Harper, como personaje principal, inicia una búsqueda para encontrar respuestas sobre su pasado y poder redimirse de sus propios errores, un proceso que se irá desarrollando a medida que explora las diferentes secciones de la casa, enfrentándose a sus miedos y a su propia culpabilidad, lo que la lleva a un viaje de autodescubrimiento y transformación. Un planteamiento que da pie a una gran diversidad de relatos, con cada una de las secciones de la casa presentando un mundo único y fascinante, poblado por personajes intrigantes y misteriosos.

Estas pequeñas crónicas criminales de carácter secundario agregan profundidad a la historia principal y enriquecen la lectura, ofreciendo un amplio catálogo de emociones y situaciones, añadiendo complejidad a la trama general. En comparación con la original House of Secrets de 1946, esta actualización presenta diferencias significativas con respecto a aquella. Mientras que la primera se centraba en historias de horror y misterio de formato antológico, la reinterpretación de Seagle y Kristiansen se sumerge en un territorio más psicológico y existencial, una parcela donde se abordan cuestiones más profundas sobre la naturaleza humana y la moralidad, alejándose del enfoque puramente terrorífico de su predecesora, ofreciendo una experiencia única y reflexiva para los amantes del cómic fantástico.

El tribunal de los secretos
Steven Seagle y Teddy Kristiansen. Dolmen Editorial. 39,90 € (328p.) ISBN: 9788419740731

Los chicos de La Cúpula son otros que no faltan a su cita con los sustos y los sobresaltos. De entre todos los nombres que barajan, hay dos que siempre se muestran dispuestos a proporcionar buenas dosis de taquicardias. El primero de ellos es un valor seguro del mundo del manga, Hideshi Hino, mangaka especializado en el género de terror y del que la editorial barcelonesa nos ha traído buena parte de su producción en viñetas. El título más reciente, Noches de Zipango, sigue con la estructura que tantas veces ha utilizado y tan buenos resultados le ha dado, el del relato corto con un hilo conductor que los une.

El concepto de Zipango hace referencia al nombre que europeos y chinos daban a Japón en el periodo comprendido entre la Baja Edad Media y la Edad Moderna, una suerte de traducción donde el antiguo chino mandarín tiene mucho que decir. En esta nueva obra nos vamos a encontrar elementos recurrentes que ya hemos podido ver en otros trabajos del autor. Volvemos a contar con un maestro de ceremonias que se encarga de presentar las siete historias en las que está dividida estas Noches. Gore, sadismo, humor negrísimo y mucha irreverencia visual marca de la casa van a salpicar cada una de las páginas de este nuevo volumen. 

Siete cuentos protagonizados por un elenco de personajes tan peculiares y variopintos como desconcertantes. Un niño al que el cerebro le crece cuanto más estudia, una niña con la cabeza vuelta del revés, una mujer sin cara obsesionada con la cirugía plástica, un grupo de niños desaparecidos en su propio colegio, un maestro sustituto de apariencia sospechosa o una niña a la que todo el mundo la compara con un ratón. Todos ellos van a dejarnos con la boca abierta siendo protagonistas absolutos en historias que transcurren a finales del siglo XX y que, por supuesto, cuentan con un desenlace donde lo paranormal y lo inexplicable tienen especial significado.

Entre tanta sangre, violencia y escena grotesca se puede vislumbrar el gusto del autor japonés por introducir una buena ración de crítica a algunos temas pertenecientes a la cultura y sociedad nipona con los que no termina de comulgar como pueden ser el concepto de familia, el materialismo o la hipocresía del país del sol naciente. El estilo amable de Hino supone un engaño ante todo lo que nos depara la lectura de su obra, creándose un contraste entre simpatía gráfica y desenfreno violento que va a impactar notablemente al lector. Noches de Zipango es una muestra más del inmenso talento de un creador que sigue sorprendiendo a todo aquel que decida darle una oportunidad.

Noches de Zipango
Hideshi Hino. La Cúpula. 11,50 € (160p.) ISBN: 9788418809828

Y si hablamos de talento, no puede faltar otro autor abonado al relato terrorífico y los giros inesperados: Thomas Ott. El autor germano-suizo es uno de los nombres importantes dentro del género y con cada nuevo trabajo que ve la luz consigue llamar la atención del fandom gracias a un estilo gráfico inconfundible donde la ausencia casi total de diálogos y un impactante uso del blanco y negro convierten su obra en una experiencia tan aterradora como visualmente maravillosa. Recientemente hemos podido disfrutar de dos títulos imprescindibles dentro de su bibliografía: Cinema Panopticum y Breakdown.

En el primero de ellos nos vamos a encontrar una historia que encierra otras historias, un recurso que parece estar ligado íntimamente a este género. Una niña visita una feria pero su presupuesto solo le da para disfrutar de una atracción. Tras probar suerte en varias casetas, se decide por un cine donde se pueden visualizar películas en unas pantallas pequeñas. Tal y como podrán suponer, cada una de estas píldoras van a contar con un desarrollo de lo más escabroso y sórdido cuyo final cómico va a aliviar toda la ansiedad provocada previamente.

The hotel, The champion, The experiment, The prophet y The girl nos van a dejar cuentos que van desde un lugar demasiado bonito y agradable como para que no haya gato encerrado hasta un combate entre un campeón de lucha libre y la misma parca, pasando por un señor cuyo sentido de la vista necesita una pequeña ayuda o la visita de unos simpáticos extraterrestres. La última de ellas, como su propio nombre indica, tendrá como protagonista a la misma niña que terminará viéndose en la pantalla en una situación que parece no ser demasiado agradable. Una vez más, el autor hace gala de una originalidad sin par que combinada con su mala baba nos va a hacer pasar un rato inolvidable.

Cinema Panopticum
Thomas Ott. La Cúpula. 16,50 € (116p.) ISBN: 9788418809774

En Breakdown, por su parte, sigue una estructura similar y vuelve a emplear el relato corto como medio para dar salida a una buena cantidad de guiones que se mueven en la misma dirección que la anterior obra. Bien es cierto que esta nueva colección se muestra por momentos un poco más desinhibida, siendo el Ott de siempre pero permitiéndose salirse un poco del camino autoimpuesto por él mismo y abrazando un humor chispeante que añade más delirio al asunto.

Un primer relato titulado The millionairs, el más largo del volumen, sirve para hacernos ver que la avaricia del ser humano no conoce límites. Le toca el turno a Washing day donde se nos muestra un episodio donde la rivalidad entre dos magos de pequeña estatura va a terminar resolviéndose con un sicario de por medio. A partir de este momento, la lectura gana en lisergia y donde no van a faltar las ceremonias paganas, suicidios, viajes al espacio, un pescador de lo más especial, sangrientos homenajes a Bugs Bunny, Alicia en el país de las maravillas y El retrato de Dorian Gray o un hostal del que mejor mantenerse lejos.

Tiene mucho mérito lo que consigue Ott con su obra. Haciendo uso de la técnica conocida como carte-a-gratter o esgrafiado (raspado de una página en negro con una cuchilla) el resultado obtenido es absolutamente memorable, con un arte minucioso y repleto de detalles que añaden una ingente cantidad de matices sobrecogedores de cara a sorprender a todo aquel que mire alguna de sus páginas. A todo esto habría que añadir el sobresaliente uso del silencio que emplea en la práctica totalidad de su producción, una estrategia con la que parece distanciarse del lector y llega a mostrarse mucho más cruel con inusitada facilidad.

De una manera o de otra, lo que el autor siempre consigue transmitir es una sensación de pesimismo constante, sus personajes no ganan nunca, todo tiene un precio para ellos y para la humanidad, una pequeña victoria acarreará consecuencias graves para la integridad física del pobre diablo en cuestión. Siempre vamos a ser testigos de un desenlace lleno de crueldad, una complicidad malsana entre el autor y el lector con la que no vamos a ser capaces de evitar que una sonrisa maliciosa se nos dibuje en la cara. ¿Esto nos convierte en malas personas? Personalmente, creemos que no. Aunque, eso sí, en el mundo de pesadilla creado por Ott, mejor que sufran sus personajes antes que nosotros.

Breakdown
Thomas Ott. La Cúpula. 16,50 € (116p.) ISBN: 9788418809781

Nos movemos hasta Diábolo, otra editorial que en los últimos años ha potenciado sus referencias relacionadas con el horror gráfico gracias a sus líneas dedicadas a los clásicos cómics de la EC y la Biblioteca de cómics de terror de los años 50, una colección que rescata todo tipo de relatos agrupados por temática y de la que nos llega su entrega número once, un volumen que nos ofrece un repertorio importante de historias en las que el voodoo será el elemento sobre el que van a girar todas las tramas. Para diferenciarlo del noveno tomo, también dedicado a esta antigua publicación, se ha optado por añadir el año 1953 en su título.

De nuevo contamos con una recopilación de relatos cortos que vieron la luz en formato revista, donde se seguía una dinámica muy marcada que presentaba un misterio de lo más intrigante y cuya resolución terminaba por volar la cabeza del lector por lo chocante de su final. Hay que tener en cuenta que el material que aquí se nos ofrece cuenta con un buen puñado de años a sus espaldas, historietas que en su momento sufrieron todo tipo de ataques pero que el tiempo las ha tratado muy bien, envolviéndolas en una halo de cierto misterio elitista que las hace irresistible al aficionado de este género. Para añadir un poco más de misticismo al asunto, los autores implicados en la confección de estas páginas no están acreditados, un hecho lamentable que cobra especial importancia teniendo en cuenta la inmensa calidad de algunos de estos relatos.

Puede que los focos de la fama apuntaran a los tebeos de EC pero nadie puede negar que lo que se veía en el magazine Voodoo no le siguiera de cerca en cuanto a calidad e interés. Teniendo en cuenta la inmensa variedad y cantidad de páginas que había que facturar mensualmente, muchos de los recursos y elementos que se usaban en los guiones podían ser más recurrentes de lo que cabría esperar por el lector. No obstante, la presencia de espíritus maliciosos, plantas con predilección por la carne, extraterrestres con muy malas pulgas, juguetes peligrosos, cuadros que cobran vida y, evidentemente, muñecos vudú, nos van a asegurar pasar un rato de lo más espeluznante.

Aquí vale todo, bajo una apariencia puramente fantástica, subyace un retrato donde se muestra lo peor del ser humano, poniendo especial énfasis en los culpables de las tropelías que desatan el terror para su propio beneficio y no tanto en las pobres y sufridas víctimas. La moraleja final nos va a dejar en más de una ocasión un desenlace bastante desasosegante para el lector, confrontando una hipotética comercialidad que se vería en peligro debido a esas últimas viñetas. Serían los vigilantes de la moralidad americana los que se fijarían en estos detalles y terminarían prohibiendo este tipo de publicaciones, una desgracia que el paso del tiempo ha atenuado gracias a editoriales como Diábolo que nos las hace llegar años después de manera periódica en unas condiciones inmejorables.

Todo lo que nos ofrece Voodoo (1953) huele a clásico, desde el planteamiento de sus guiones hasta el aspecto visual de cada una de las aventuras contenidas en él. Un trazo y un tratamiento del color tosco y primitivo que rivaliza con las técnicas usadas hoy en día, algo que no desmerece ni un ápice a la hora de valorar su calidad plástica. Al contrario, esa naturaleza añeja juega a favor de una lectura que se va a ver favorecida gracias a ese conjunto de elementos, haciendo que el aficionado asimile el contexto de manera natural y con suma facilidad. El caudal imaginativo de aquellos dibujantes y las estrategias que empleaban a la hora de plantear las páginas en las que se desarrollaba la acción van a dejar sin palabras a más de uno, sirviendo de base para muchos autores actuales que buscan aquí algo de inspiración. Un volumen tan delicioso como todos los anteriores que ofrece otro repertorio de historias inquietantes donde la calidad se hace palpable desde la primera hasta la última página, lo que incluye la exquisita introducción de M. H. Price, autor y editor de libros y cómics de terror que sirve como la perfecta avanzadilla a todo lo que se nos viene encima.

Biblioteca de cómics de terror de los años 50: Voodoo (1953)
V.V.A.A. Diábolo Ediciones. 34,95 € (184p.) ISBN: 9788419790187

La siguiente parada nos lleva hasta ECC Ediciones, lugar de reunión de los héroes de DC Comics pero que no pierden de vista lo que ofrecen otras editoriales como Skybound, subsello de Image en el que Robert Kirkman da rienda suelta a su capacidad para pergeñar o producir títulos que abarcan todo tipo de géneros, como por ejemplo, el terror. Nos centramos en la primera entrega de Fantasmas, maxiserie que se prolongó a lo largo de veinte entregas en las que el guionista Joshua Williamson y los dibujantes Goran Sudzuka y Davide Gianfelice nos plantean un relato en el que un reputado ladrón tendrá que adentrarse en una casa para robar, y aquí viene el giro inesperado, un fantasma.

Como podrán imaginarse, la trama urdida por Williamson va a contener elementos de los subgéneros en los que se apoya: atracos y casas encantadas. Jackson Winters es un genio a la hora de hacerse con la propiedad ajena, todo un maestro cuya carrera se vio truncada en el último trabajo donde todo se torció y terminó encerrado en la cárcel. Sin embargo, parece que hay esperanza ya que un multimillonario lo pondrá en libertad a cambio de una faena. Winters tendrá que reunir un nuevo grupo para que se adentre en una mansión encantada y se hagan con el fantasma que habita allí. Lo dicho, una mezcla imposible que termina funcionando a la perfección.

Leído este primer volumen, resulta muy llamativo que la colección no contara con el respaldo de unas buenas ventas en su primer intento de publicación en nuestro país hace algunos años de la mano de Planeta. No es precisamente un título nuevo, su primer número vio la luz allá por el 2013, diez años que la han convertido en una de esas lecturas de culto que siempre terminan por sorprender al que decide darle una oportunidad. El ahora pluriempleado Williamson, consiguió llamar la atención gracias a un guión ágil y tremendamente entretenido, lo que le catapultó dentro de la editorial madre, Image, haciéndose un nombre importante dentro de la industria y llegando a una posición privilegiada como la que está viviendo actualmente. Esperemos que esto sirva para poder disfrutar en breve de otra maravilla como es Birthright, inexplicablemente inédita por estos lares.

Las labores artísticas se las reparten entre Sudzuka y Gianfelice, encargándose cada uno de ellos de un arco argumental. El primero de ellos es uno de esos nombres que ha aparecido en las portadas de un buen número de editoriales, desde Marvel y DC hasta AWA, IDW o Aftershock. Una carrera en la que su camino se ha cruzado en más de una ocasión con el de Garth Ennis, convirtiéndolo en una opción más que interesante para cualquier obra que requiera un estilo tan efectivo como académico. Su compañero italiano, de trazo similar aunque ligeramente más grueso y sucio, consigue aportar un aspecto inmejorable y sirve como complemento perfecto para conseguir una homogeneidad que no reste al resultado final.

Bien es cierto que el guion hace uso de los tópicos de ambos géneros, terror, humor, un plan aparentemente infalible, un grupo de lo más variopinto en el que cada miembro tiene asignado un cometido y la presencia de personajes delirantes como un mago, una médium o unos reporteros de casos sobrenaturales. El conjunto termina funcionando de manera inmejorable, manteniendo la tensión y la intriga en todo momento, con unos protagonistas muy bien definidos y una historia con el suficiente gancho como para tenernos pegados al tomo pasando páginas de manera frenética hasta llegar al final, momento en el que desearemos tener la continuación para conocer el destino de esta atípica banda de ladrones.

Fantasmas Volumen 1
V.V.A.A. ECC Ediciones. 26,00 € (240p.) ISBN: 9788419678881

Y si hablamos de terror y estamos en DC, no podemos dejar pasar la oportunidad de referirnos a uno de los títulos legendarios de su extinto sello para lectores adultos, Vertigo. Sandman de Neil Gaiman ha seguido de máxima actualidad gracias a una serie de colecciones que han ido apareciendo años después de su final en las que se han utilizado conceptos y personajes de aquel maravilloso mundo de sueños. La referencias más reciente, Universo Sandman: País de pesadillas, aporta su granito de arena en la expansión de la cada vez más poblada franquicia y lo hace, además, con una escalofriante historia.

No hay que ser demasiado experto en la materia para imaginarse quién es el protagonista de esta miniserie solo atendiendo a la palabra “pesadilla” que aparece en el título. El Corintio, una de las creaciones más oscuras, enfermizas e inquietantes de cuantas surgieron de la mente del guionista británico. La personificación de la maldad humana se convirtió en uno de los habitantes del Sueño con mayor índice de popularidad entre los lectores. Una pesadilla renegada que tuvo su punto álgido durante la saga titulada La casa de muñecas, un relato que nos traslada hasta una convención de asesinos en serie.

Esta nueva incursión en los designios de Morfeo nos presenta a Madison Flynn, una estudiante de Bellas Artes en cuyas obras parece haber un elemento recurrente que se repite en todas ellas: un rostro que en lugar de ojos muestra dos pequeñas bocas. ¿Les suena? Todo discurre con normalidad hasta que El Corintio se topa con estos cuadros en los sueños de un amante de la artista, algo que va a coger completamente desprevenido al temible personaje. La excusa perfecta para que hagan acto de presencia algunos nombres ilustres de este universo expandido como el mismísimo Sueño, Thessaly, Lucien, Éxtasis, Agonía y algún que otro demonio surgido en las páginas de Hellblazer durante la etapa firmada por Jamie Delano.

Este País de pesadillas se destapa como el spin off más acertado de todos los que han sido publicados hasta el momento, mención que se la debemos al espléndido trabajo realizado por James Tynion IV, guionista que siempre cita a Gaiman entre sus influencias. Su trabajo aquí se muestra muy respetuoso y coherente con Sandman, añadiendo nuevos matices sin perder de vista el material original que lo utiliza como referencia para todo lo que nos está contando, una forma magnífica de atraer a nuevos lectores y tener contentos a los más veteranos.

Contar con el argentino Lisandro Estherren al dibujo añade el componente perturbador necesario para que la lectura sea toda una experiencia aterradora. Su trazo fino, ligeramente deformado y especialmente sombrío nos atrapa y nos lleva en volandas en este paseo pesadillesco. Tan buenos resultados ha tenido el cómic que, actualmente, se está publicando una segunda serie, The glass house, con el mismo equipo creativo que promete emociones de la misma intensidad que su predecesora. La esperaremos con ansiedad.

Universo Sandman País de pesadillas
James Tynion IV y Lisandro Estherren. ECC Ediciones. 25,00 € (184p.) ISBN: 9788419811660

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest