Kenneth Moe, traducción del noruego al español por Ana Flecha. Poklonka Editores (Colombia) 9,10 € (100 p) ISBN 978 958563609 5
Tocar lo que está ahí, describirlo, desmenuzarlo y ver en la simpleza de su ser el pretexto para dejar que la vida se dibuje frente a los ojos, con toda su miseria y la profundidad de lo que la configura y le da forma; pero no para hallar una cura, no para que el encuentro lo cambie todo, quizá sólo para comprender que la existencia se ha vaciado de todo asombro. “Lo más cerca que me encuentro de tener un yo es estar harto de mí mismo”.
Kenneth Moe (Inquietud), parece hacer un relato confesionario, ensayar en la hoja y vaciarse a sí mismo en la historia de un hombre que, a través de un viaje con alucinógenos, desdobla su presencia una y otra vez, hallando en cada pliegue un nuevo pretexto para narrar ya no su desdicha o su miseria, sino el vacío de su vida, la pulsión que lo lleva hacia delante y que también le provoca descubrir que en sí mismo ya no encuentra nada, que desde hace mucho está enterado, aunque quizá no lo quisiera, de su insignificancia y su cansancio. La experiencia va del té con alucinógenos en la recámara al viaje en el bosque, y de la preocupación por no tener un lugar para vivir, a los cuerpos de las mujeres con quienes no ha podido establecer ningún vínculo, de la nada al vacío y de vuelta a entender que no basta con la curiosidad y la conciencia.