Nuestra visión del mundo de los servicios de inteligencia y espionaje discrepa mucho de la realidad. Únicamente conocemos su versión distorsionada por el cine, las series o los libros de ficción. Sin embargo, 46 Segundos (Caligrama, 2023) nos brinda la oportunidad de acercarnos a la verdadera realidad de inteligencia oculta tras la ficción, dado que no siempre podemos sentarnos con alguien que conoce de primera (primerísima) mano un mundo paralelo tan desconocido, lleno de complejidades y sobre el que casi nadie puede hablar en primera persona.
¿Podrías decir en pocas palabras de qué va 46 segundos? ¿Qué podemos esperar de este libro?
Este libro mostrará al lector cómo realmente es el mundo secreto y paralelo de la inteligencia moderna, el mundo invisible de las operaciones encubiertas. Leer 46 segundos también le permitirá comprender mejor la génesis de los eventos internacionales contemporáneos. También es una historia sobre destinos humanos extremadamente complicados… sobre decisiones muy difíciles que deben tomarse en nombre de razones superiores, aunque en circunstancias normales estas decisiones nunca se habrían tomado. Es una historia sobre un mundo en el que a veces un evento que dura literalmente una fracción de segundo, puede cambiar completamente el destino humano… convertir el amor en el sufrimiento… convertir la vida en la muerte…
¿A qué se debe el título del libro?
Me gustaría dejar la interpretación del título a los lectores.
¿Crees que hacía falta un libro como 46 segundos, que enseñase las dos caras de este mundo?
La evaluación del mundo es ambigua en su paradojismo. Por un lado, el mundo es tan simple que no hay la menor necesidad de complicarlo. Por otro lado, es tan complicado que escapa a la sencillez que hace que sea más fácil vivir. 46 segundos ayudará no solo a capturar el equilibrio entre estas proporciones, sino también a capturar el equilibrio entre las diferentes caras del mundo en el que vivimos actualmente.
¿Hay alguna persona o algún momento de tu vida que hayan influido en la creación de esta novela?
A principios de 2020. Dos días después de mi regreso de Beijing a Europa, se declaró el estado de la pandemia de la Covid-19. Las fronteras, los aeropuertos y prácticamente todo el tráfico internacional, que es un elemento esencial de mi trabajo, fueron cerrados. Tampoco podía volar a donde vivía en ese momento. Siendo un prisionero involuntario de esta situación, decidí aprovechar este tiempo al máximo. La creatividad es como el oxígeno para mí. No puedo vivir sin ella, sin este proceso intelectual permanente, escribiendo pensamientos en páginas dobladas con un bolígrafo en cuanto nazcan en mi cabeza. Atracción fatal que no permite ni siquiera 46 segundos de despreocupación sin pensar.
El libro está ambientado en un mundo extremadamente complicado y oscuro, ¿de qué manera crees que has conseguido transportar al lector?
La clave que utilicé es presentar conocimientos complicados y un mundo complicado de una manera accesible y, sobre todo, espero, muy interesante. A través del detalle de los retratos de los personajes, el detalle de descripciones, lugares y otras circunstancias, quise lograr que el lector se convierta en testigo ocular de los eventos descritos, para que se identifique plenamente con el destino de los personajes del libro.
¿A la hora de sentarte a escribir el libro has podido rememorar experiencias y vivencias pasadas?
Sí… Los recuerdos me han acompañado a lo largo de escribir este libro. Sin embargo, tuve que tener mucho cuidado de no recordar accidentalmente demasiado…
Apuntas que una de las grandes ventajas del libro es su puntualidad para las sociedades occidentales actuales, ¿se podría decir que 46 segundos podría ser una base para el pensamiento crítico?
En algunos países ya es así. Este libro se convirtió en el punto de partida para lanzar varios análisis de sistemas y lanzar procesos de cambio del estado actual de las cosas. Esto se aplica, por ejemplo, a la reforma de las instituciones de inteligencia y contrainteligencia. En cuanto a lectores individuales, que son lo más importantes para mí como autor, la opinión que hasta ahora he observado con frecuencia es que después de leer «46 segundos», nada es como antes.
¿Podemos ver algunas anécdotas personales reflejadas en el libro?
Desafortunadamente, sí… Y utilicé la palabra «desafortunadamente» porque la naturaleza complicada del mundo paralelo que describo significa que a veces no hay buenas soluciones… solo las malas. Incluso si a la gente del «exterior» le parece que una buena solución está al alcance de su mano…
Teniendo tanta experiencia en este mundo, ¿es posible ser completamente transparente escribiendo?
No importa lo que piense al respecto como autor. Lo que importa es lo que el lector piensa al respecto, porque es a él a quien se dirige el mensaje contenido en 46 segundos.
Siendo una persona experta en varias ramas de la psicología, ¿crees que has conseguido conectar emocionalmente con el lector?
Eso espero. Este libro está lleno de reflexiones, elementos y prácticas del campo de la psicología práctica, que para muchos lectores pueden resultar extremadamente útiles en la vida cotidiana. El conocimiento psicológico se transmite con ejemplos específicos de experiencias humanas, lo que hace que sea más fácil de absorber.
46 segundos se está adaptando actualmente a la gran pantalla, ¿recomendarías leer el libro antes?
Si pudiera sugerir algo es que la aventura con «46 segundos» definitivamente vale la pena comenzar con la lectura del libro. La naturaleza dinámica del cine, pero también, desafortunadamente, limitada en el tiempo, significa que no todos los sucesos o detalles pueden transferirse de las páginas de las novelas a la pantalla. Puede resultar que para algunos lectores sean estos fragmentos del libro omitidos en la adaptación cinematográfica los que resulten ser los más interesantes y valiosos.
De cara al futuro, ¿cómo te gustaría verte como autor?
Aunque 46 segundos está traducido a seis idiomas y se está haciendo una adaptación cinematográfica de largometraje, no me considero un escritor, sino un aficionado, por lo que es difícil para mí hacer tal predicción. No seré yo quien decida mi futuro literario, sino los lectores…
Entrevista realizada por Miguel Velasco