—¿Fórmulas como el teletrabajo han venido para quedarse en el mundo de los medios de comunicación? ¿Cómo afectará esta fórmula a la relación entre medios, periodistas y lectores? ¿Qué de bueno y de malo tendrá?
- Craig Forman, un ex corresponsal del The Wall Street Journal y ex CEO de la McClatchy Company, la editora del Miami Herald y el Sacramento Bee, entre otros muchos diarios, dice que las redacciones ya no volverán a ser lo que eran. Craig explica en RESET (Galaxia Gutenberg, 2021) que “no habrá nadie en las redacciones por al menos. ¿un año? El retorno ya no será el mismo. Los redactores regresarán, pero serán muchos menos y más digitales. Las redacciones tendrán salas de conferencia, cafeterías muy distintas a las que había hasta ahora y muchos asuntos se despacharán en coffee bars, no en grandes cafeterías”. Yo creo que, efectivamente, muchos profesionales continuarán trabajando desde casa, lo que permitirá a los editores tener espacios muy operativos, pero algo más reducidos y quizá más baratos. Aquellas escenas en redacciones llenas de mesas que sólo se ocupaban unas horas al día creo que no regresarán.
—La tecnología ha permitido en tiempos tan complicados como los que hemos vivido y seguimos viviendo permanecer conectados e informados. ¿Más conexión significa o debería de significar más calidad en la información?
- La digitalización nos ha permitido la inmediatez. Pero la inmediatez de una noticia dura unos minutos o unas horas en el caso de un acontecimiento important…, el asalto al Capitolio del 6 de enero es un buen ejemplo. Pasadas las primeras horas, además de nuevas imágenes y nuevos datos sobre el asalto, llegó la información de análisis. En la digitalización pueden convivir el breaking news y el slow journalism. Todo depende de tener buenos cuadros en las redacciones y direcciones que entiendan la necesidad de compaginar ambas técnicas con la ayuda, claro está de las herramientas digitales. Para mi, la historia perfecta es la que mezcla buen el diseño, el contenido, el análisis de las redes sociales y el buen uso de las herramientas adecuadas para cada historia.
—¿Y una vuelta a la normalidad traerá aparejada una vuelta a los clásicos hábitos en los medios de comunicación?
- No creo que regresemos a los viejos hábitos. Las quejas por la digitalización, por ejemplo, se habrán terminado, lo que era un impedimento para el desarrollo digital. Y los editores habrán visto claramente que la digitalización no es un objetivo, es una nueva manera de hacer negocio y periodismo.
—¿Cómo es posible compaginar la información digital con la rentabilidad económica de los medios? ¿Hacia dónde se dirigen las políticas económicas de los medios vinculadas al uso de internet?
- El periodismo siempre ha sido además de un faro democrático, un negocio. Va a ganar dinero el que lo haga bien globalmente, porque va a tener un mercado infinito de lectores-usuarios, y los que sepan elegir un buen nicho local. El inglés y el castellano pueden ayudar a cubrir continentes, y las noticias locales o temáticas concretas permitirán ganar dinero, en parte porque las estructuras de esas webs serán muy inferiores y más racionales que las que en su día tuvieron, y aún tienen, algunos periódicos locales o regionales.
—En un mundo cada día más digital ¿qué papel ocupará la tinta y el papel?
- El que quieran los usuarios, pero será un territorio muy menor. The New York Times y The Guardian dan ya a sus ediciones de papel un valor mucho más inferior que a sus ediciones digitales. Yo mismo cuando abro un Times en Manhattan ya me doy cuenta de aquel diario ya no es lo mismo que hace 10 años. El debate para mi no es cuando desaparecerán los diarios. El debate es cuando los diarios serán digitales al 100%, aunque sigan imprimiendo. La convergencia de redacciones, las famosas fusiones de redacciones, aún no están funcionando como debieran. En RESET periodistas representantes de los más importantes del mundo explican sus problemas y como creen que se puede resolver este dilema.
—¿Cómo se han preparado los medios para esta nueva etapa digital que usted anuncia?
- Los medios recibieron internet en 1995 con sorpresa, pero no se tomaron el tema en serio, sino no estaría pasando que 26 años aún estemos debatiendo sobre la digitalización. Era un hecho en 1995 que internet lo iba a cambiar todo. Y la tardanza en hacer el cambio ha causado gastos astronómicos. Y un aviso de los protagonistas de RESET… la digitalización es cara, muy cara. La tecnología avanzará rápidamente y sólo los medios que ganen dinero podrán aguantar el ritmo. Se trata pues de tener claro tu mercado, no defraudarle y hacer las cosas bien. Es la misma fórmula que existía en el periodismo tradicional, lo que ocurre es que ahora la posibilidad de comunicar es mucho más rápida, y puede terminar resultando, si se sabe hacer, más entretenida y más interesante.